Lo que cuentan de una estancia corta con NPH…

Quienes han vivido una estancia corta con NPH en América Latina cuentan de cómo se integraron en la familia NPH, se acercaron a nuestros programas para niños vulnerables y llegaron a un aprecio especial del compromiso de NPH.

Laura, NPH Honduras

Hola desde NPH Honduras.

Por aquí todo súper, súper bien. Muy buen ambiente y muy interesante y divertido. Este fin de semana fuimos cerca de San Pedro Sula a construir casas para los que perdieron sus viviendas durante los huracanes Eta y Iota, y ha sido una experiencia dura pero muy bonita a la vez. Con tan sólo dos días hemos construido 8 casas.

Y el fin de semana que viene vamos con los otros voluntarios a pasar el finde al lago Yojoa y ver unas cascadas que hay por allá. Tengo muchas ganas de conocer el país con mayor profundidad.

En la farmacia tengo mucho trabajo y me gusta, porque cuentan conmigo y me involucran en todos los proyectos. Me he estado encargando de preparar la campaña de desparasitación intestinal, cuya presentación hicimos la semana pasada. En estos momentos, se han puesto en contacto con nosotros, 2 médicos de NPH internacional para un proyecto que trata de estudiar la polimedicación de los niños en Honduras: interacciones, efectos secundarios, dosis, etc. Queremos ver si les podemos disminuir la toma de medicamentos y ver si esto contribuye a mejorar el rendimiento escolar y la conducta de los niños polimedicados.

Marc y Mirea, NPH Guatemala

Xavier, Mirea y Marc

«La estancia en la comunidad de NPH Guatemala ha sido un intercambio constante de conocimientos. Me llevo una parte del hogar dentro de mi corazón.«

«De los casi 100 niños y niñas que residen en el hogar, hemos compartido una parte de su día a día con ellos y ellas, conocer sus hobbies e inquietudes y realizar actividades lúdicas y de ocio en su tiempo libre.

Durante estos 15 días de estancia, nos han permitido implementar diferentes talleres de educación emocional, roles de género, dinámicas sensoriales y autoconocimiento, así como intercambio de juegos tradicionales, pudiendo educar a través del juego.

Ha sido una experiencia difícil de olvidar y espero y deseo poder volver en algún momento.»

Toni, NPH Guatemala

Toni con niños de NPH Guatemala

“Acabo de llegar al hogar de NPH Guatemala y las primeras impresiones son fantásticas.”

La verdad es que aquí es increíble como viven los niños, como juegan, como comparten sus vidas con los demás niños e incluso como se acercan a nosotros, que venimos a ver lo que hacen, y realmente es una experiencia fantástica. Muy recomendable.

Eva, NPH República Dominicana

“Este verano mi familia y yo tuvimos la oportunidad de visitar NPH en República Dominicana.

Nuestra hija mayor había ido a hacer un voluntariado en ese hogar y nosotros fuimos a recogerla. Fue una experiencia muy entrañable.

Lo primero que nos llamó la atención fue el buen ambiente que se respiraba. Los niños y niñas se veían tranquilos y contentos. Todas las personas con las que interactuamos fueron muy amables y hospitalarias con nosotros.”

“Nosotros allí, a pesar de acabar de llegar, éramos uno más de esa gran familia y así te hacían sentir.